Mariam Kidd en Second Life: Hills Cadonicus

martes, 18 de octubre de 2011

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Hills Cadonicus

La pequeña llego a las puertas de la ciudad con una gran brecha en la cabeza, hambrienta, sucia y sin memoria.
La niña Flor le abrió la puerta y le dio de comer, dejándola dentro de la kennel. Allí a través de sus barrotes vio por primera vez al amo guapo, que fue a buscar aun verde por que la pequeña se sentía muy mal. Pero había una feria en la ciudad y los amos estaban muy ocupados.

Esta salió en busca del amo guapo y se dirigió a la taberna donde sabia que encontraría comida. Allí y hablando con otro amo se desmayo y este la llevó a la clínica a curarla.

Después la reviso la verde, la curó y le receto que comiera porque estaba muy flaca.

Siguió vagando por la ciudad sin comprender sus costumbres y sin saber quien era.

Hablando con su nueva hermana ying y viendo en sus ojos reflejadas las 3 lunas de gor y recordó su nombre, lua.

Permaneció 7 lunas en la kennel sin que nadie la reconociera y la reclamará por lo que pasó a pertenecer a la ciudad. Sin memoria, sabiendo su nombre y con su nueva hermana era feliz. Empezaron ha hacer travesuras y trastadas y de vez en cuando alguna imagen del pasado acudía a su mente.

Un día encontró a un hombre el la taberna que le dijo que que pequeño era gor y que sabia quien era esta, pero cuando esta le preguntó, dio media vuelta sin contestar.

Días más tarde encontró dos kajirae y una de ellas apenada por que no esta no la reconocía me contó que yo era su hermana, la que había sido primera de su cadena y el amo que reconoció a esta en la taberna había sido mi amo. Esta recordó todo y se alegró mucho de reencontrarse con sus hermanas, aunque triste por que el amo la había repudiado. Pero al llegar a la kennel su hermanita ying la hizo reír con sus locuras y esta olvido su tristeza. Era feliz con su nueva hermana, era feliz con los amos de la ciudad, a los que sirve con devoción amor y respeto. Bueno con respeto mas algunos que a otros, por que a lua le encanta sacarles de quicio con sus preguntas y hablando sin parar liándoles de tal manera que no saben lo que han ordenado ni lo que desean.

Con la memoria reseteada recordó su negocio de kanda y como a los amos le gusta. Camelo al amo nieto para que le diera unas semillas. Ella y ying las sembraron y las riegan todos los días. Mientras vuelven locos a los amos nieto, guapo, ogro, pelón, borde, etc... con sus locuras.

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